Bailabas al son de mil bandas sonoras que nos rodeaban. Es lo que tiene el verano.
Tu mirada siempre me llenó de inquietudes... cómo crecerías, cómo serías, a qué te dedicarías...
De pronto, todo se nubló y una estampida de almas asustadas trájicamente, soltó esa mano tuya de la mía. Grité tu nombre entre la multitud, te llamé mil veces entre el miedo. Volví a gritar tu nombre entre la sangre y entre lágrimas te busqué.
Jamás pensé, mi vida, que aquella tarde, un instante nos separaría para siempre.
#TodosConBarcelona